Tisteza

A veces, cada mes o veinte días siento esas pocas ganas de continuar, de levantarme, de terminar, de estar sencillamente. Lo bueno que a este punto puedo reconocer es que lo estoy contando, lo exteriorizo. Lo malo de hacer esto es que encuentro gente en las mismas. Mis amigas también se deprimen, ellas también la pasan mal. No podría enumerar los diferentes pensamientos que al respecto tienen, pero sí podría mencionar los míos.

Podría por ejemplo decir que sólo tengo ganas de dormir, ni si quiera de pensar, que cuesta mucho salir, hablar, que mi cara dice todo lo que de mi boca no sale.

¿Qué apacigua este estado? talvez nada, talvez la distracción, es decir, la concentración en otras cosas, ¿será eso?, ¿la lectura? ¿la compañía? ¿qué será?.

Pero es normal, todos se deprimen. No, no es normal, una cosa es la tristeza, otra la depresión. Yo creo que estoy al borde de la segunda, si es que no ya in. Me escapo, pongo de mi parte, peor mantengo esos silencios, esos temores, esos sueño que revelan mis miedos. Tengo esto, estas voces me acompañan. Esto tengo.